A veces quiero creer que todos
los seres humanos que habitan este planeta tienen buenas intenciones y que
cuando hacen algo malo es porque los mueven motivos dolorosos, que no hay nada
más que dolor detrás de las malas acciones de este mundo, pero por favor!!
Todos sabemos que eso no es cierto.
En mi mundo perfecto soy una
de esas personas que sólo miran y se creen con el derecho de emitir una queja
pero la realidad es diferente. Soy una persona que a veces hace
cosas con la más pura mala intención de fondo. Creo que lo hago para no
aburrirme tanto, agito un poco mi vida provocando problemas y una que otra vez
un par de lágrimas; y claro que no estoy orgullosa de eso, podría hacer muchas
cosas al respecto pero por ahora no sé cómo hacerlo. Suena cínico
pero es la verdad, decir que no puedes hacer algo al respecto es sólo una forma
mediocre de contemplar los problemas.
El hecho es que las personas
adoptamos un papel y entramos en el juego de criticar, juzgar y, lo más grave, lastimar
sin razón aparente. No niego que no sea divertido o interesante pero el
problema son las consecuencias; no deja la misma cicatriz la cortada de un
papel que la de un cuchillo. Somos capaces de todo con tal de ganar los juegos
que nos proponemos y tomamos tan serio nuestro papel que a veces ese papel se convierte
en parte de nosotros y lo que es un juego se convierte en nuestra profesión, por decirlo de alguna manera.
Nadie está exento de ser parte
de esto, sólo que a veces nos toca ser la víctima y otras más el victimario. Intento
comprender todo esto pero simplemente estoy tan familiarizada con la dinámica que
no puedo comprenderlo de una manera objetiva. Y arrastrados en medio de esta
corriente de maldad no nos queda de otra que vivir siempre en alerta para
detectar cuando alguien está por atacar pero ¡rayos! Existiendo siempre tan
buenos jugadores que nos engañan bajamos la guardia y somos
derrotados de manera brutal.
Es un círculo vicioso en el que
cada vez más y más gente está participando, y la verdad a mí no se me ocurre
nada para solucionarlo. Así que en vez de preocuparme me voy a ocupar, tengo
que desarrollar resistencia y fortaleza para enfrentar a los mejores jugadores
que podrán engañarme pero jamás ganarme.