Cada día lo que hace girar al
mundo se aleja más y más de lo humano. Somos materialistas, no hay cosa
que no podamos comprar, incluso el amor puede ser comprado. Estamos perdiendo
el sentido de lo que es “amar”, esa palabra sencilla, tan fácil de expresar
para unos, tan comprometedora para otros. Su significado se ha ido
distorsionando, complicando, se ha perdido el sentido de amar a alguien, más
que amar a algo.
Ha dejado de ser verdad eso de
que al mundo lo hace girar el amor, actualmente todo lo hace girar menos eso.
Vamos por la vida esperando lo peor de las personas, haciendo planes para
cuando se rompan las promesas, haciendo barreras que se interpongan entre nosotros
y las demás personas, ocultándonos, protegiéndonos, nos adentramos en la
búsqueda del sustituto perfecto del amor. ¿Hasta cuándo entenderemos que ese
sustituto no existe? Esas mariposas en el estómago no se pueden comer, la
mirada brillante no viene en el paquete de los lentes, la angustia de saber cuándo
llamará no está incluido en el plan de tu celular.
Ahora el amor es una pesadilla
que evitamos convertir en realidad, las historias de amor son una fantasía más
increíble que Peter Pan y el insomnio por estar amando con el pensamiento ahora
es una moda de las que todos somos parte, aún si no tenemos claro el por qué
amamos.
Y quizá sí, el amor ya no es el
mismo de antes, se ha transformado con el tiempo como todo lo demás en el mundo.
Ha evolucionado pero en vez de mejorar, como la tecnología, la idea del amor se
ha ido degradando. Queremos racionalizar la única cosa que nos permite ser
humanos, ahora todo es estrategia y juego, ya no queremos arriesgarnos porque
ilusamente creemos que todo lo que tenemos por perder es mucho más de lo que
tenemos por ganar.
Lo cierto es que amar es una
decisión, es querer poner toda tu fe y toda tu confianza en una relación
esperando lo mejor, es tener siempre en cuenta que el amor no es una competencia
ni una lucha de poder. El amor es dar lo mejor de ti mismo para poner las
probabilidades de éxito a tu favor y aún cuando no funcione debes mantener la
esperanza de que algún día lo hará.
Somos muy materialistas pero el amor sigue moviendo al mundo.
ResponderEliminarSaludos
q bonitooooooooooooooooo!
ResponderEliminar